Dime qué te dices y te diré quién eres ¿Cómo te explicas tus logros y fracasos?
Feb 16, 2024“No hay nadie menos afortunado que el hombre a quien la adversidad olvida, pues no tiene oportunidad de ponerse a prueba”. Séneca.
Era un día aparentemente normal para Andrea, contadora y auditora independiente, cuando de repente recibe un mail de uno de sus principales clientes quejándose de una aparente mala deducción en sus impuestos.
Minutos más tardes recibe otro mail de otro cliente agradeciéndole por su profesionalismo al ayudarle a solventar varios problemas, incluso le comentó que un amigo suyo la iba a llamar para requerir sus servicios.
Es decir que en términos futbolísticos Andrea había empatado, una buena y una mala.
Teniendo en cuenta que las cifras de depresión y ansiedad está disparadas en el mundo, es conveniente desarrollar un tipo de actitud resiliente que nos ayude a continuar en el camino de la vida personal y profesional.
Pero, ¿cómo hago para mantenerme a flote cuando las cosas no parecen avanzar?
Una de las herramientas más importantes y poderosas de los últimos años la proporciona el padre de la psicología positiva el Dr. Martin Seligman, con su famoso modelo del estilo explicativo de tus éxitos y fracasos.
Obviamente que Andrea se sintió muy mal con el primer correo, comenzó a cuestionarse como profesional e incluso puso en duda su profesionalismo.
Y, ¿qué pasó con el otro correo, el bueno, el positivo, el que incluso le había generado un posible nuevo cliente?
Al parecer no causó ningún efecto porque se quedó anclada en la emoción negativa del primer mail.
La razón principal por la cual nos cuesta levantarnos después de varios golpes profesionales, personales, emocionales o vitales es a causa de una forma de pensar basada en tres enfoques; Personalización, prevalencia y permanencia.
- Personalización: Pensamos que hay algo malo en nosotros.
- Prevalencia: Aquello malo que me sucedió afectará mi desempeño en las demás áreas de mi vida.
- Permanencia: El efecto negativo de un evento durará por mucho tiempo.
El persistir con esa forma de pensar generará un estado de ánimo distímico e incluso depresivo.
Un muy buena solución la encontramos en la psicología positiva a través del estilo explicativo el cual se define cómo la forma en la que nos explicamos el porqué suceden las cosas que nos pasan, buenas y malas.
Según el Dr. Seligman, los eventos en nuestras vidas, buenos y malos, pueden generan una auto explicación con base en los siguientes elementos:
1.Interno o externo: ¿El evento fue impulsado por mí o causado por circunstancias externas?
2.Permanente o transitorio: ¿Hay posibilidad de que se repita, se quedarán las cosas como están o cambiarán?
3.Global o local: ¿Fue algo que afectó la totalidad de la mi vida o solo una parte?
Una persona puede interpretar un evento, éxito o fracaso, de manera consciente o inconsciente utilizando la siguiente plantilla mental.
Cuando las cosas no salen bien en nuestra vida una y otra vez, puede ser a causa de un estilo explicativo pesimista.
La solución para desarrollar actitud resiliente es ver los eventos negativos como externos, transitorios y específicos.
Claro está que esta esquema está diseñando para nuestro dialogo interno, personal más no para un informe en una junta directiva o evaluación de desempeño.
Historia
En una oportunidad un señor iba de paseo con su hija la cual iba conduciendo.
Al poco tiempo del trayecto comenzó a llover muy fuerte. La muchacha le pregunta a su padre si cree que debe continuar. El padre le responde que continúe.
Minutos más tarde la tormenta se hace más fuerte, la muchacha vuelve a preguntar si debe continuar pero esta vez con un poco más de nerviosismo. El padre le dice que continúe lento pero que continúe.
La tormenta se hace mucho más fuerte que incluso los demás autos comienzan a quedarse en la orilla.
La joven vuelve y pregunta si debe seguir aunque esta vez con mayor insistencia.
El padre responde que baje la velocidad, que siga la marcha un poco más lento pero que siga adelante.
La muchacha le hace caso y momentos más tarde deja de llover y comienza a salir el sol.
En ese instante el padre le pide que detenga el vehículo y salga del auto un momento.
La muchacha un poco desconcertada pregunta el por qué.
El padre le dice señalando hacia atrás: “Para las personas que se quedaron allá no ha pasado la tormenta, en cambio para ti que seguiste avanzado en medio de ella ya no hay tormenta e incluso estás disfrutando de un hermoso sol”.
Así es la vida, ¿Qué debemos hacer cuando las cosas se ponen difíciles? Aguantar y seguir adelante sabiendo que podemos hacer uso de nuestra capacidad de resiliencia para lograr nuestras metas.
Este tema hace parte del nuevo curso proferr de resiliencia y mindfulness laboral. Si deseas más información escríbenos y con mucho gusto te hacemos llegar todos los detalles.